lunes, 13 de diciembre de 2021

CAZAFANTASMAS, MÁS ALLÁ

Esta nueva entrega quiere recuperar las primeras películas de esta saga, las originales. El adn de esta nueva propuesta es la nostalgia. En algo que proviene de los ochenta no puede ser de otro modo. Algo que los ajenos a esta década no tendrán, pero que aquellos que vivieron la película en primera persona no podrán evitar. A ellos van dirigidos este tipo de productos, y de paso captar algún nuevo fan no estaría nada mal.

La película tiene todos los condimentos para ser éxito. Además posee las cualidades para ser un producto de los 80 siendo una película actual. A diferencia de Cazafantasmas (1984), esta está protagonizada por niños. Lo que la acerca mucho a títulos como Goonies, Exploradores, E.T., o a la serie, que también está inspirada en esta década: Stranger Things. 




Si se hubiese estrenado en aquellos años, hoy sería una película muy querida y recordada, como lo es la original, no nos cabe duda. Pero al ser un producto actual, que se agarra con uñas y dientes a la nostalgia para dar valor al conjunto, también estamos convencidos que recibirá una larga lista de críticas. 


Puede que a algunos les hubiese gustado un producto que se diferenciada del original mucho más. Pero al fin y al cabo, eso es querer algo que les gusta a ellos, pero no a otros. Cuando decimos otros, nos referimos a los millones de fans de la película de 1984. Que agradecerán que esta nueva apuesta este hilada a la primera como lo está. Que prácticamente se merece ser la segunda parte de la primera película de los ochenta. Recordemos que existe una segunda parte, Cazafantasmas 2 (1989), también muy divertida.

En algunos blogs americanos explican que esta nueva entrega continua desde la segunda parte de la saga. Ya que ambas películas (las antiguas), narran hechos similares que acontecen en la misma ciudad durante el mismo periodo de tiempo. Los personajes son prácticamente los mismos en las dos películas. Así que tiene bastante sentido que todo lo que acontece en Más Allá sea herencia también de Cazafantasmas 2 y no de la primera tan solo.



Argumentalmente si que parece seguir más de cerca los acontecimientos de la película de 1984. Ya que el peligro en esta nueva entrega llega de Gozer, el demonio que quiso arrasar Nueva York en 1984, y no se habla de Vigo, el demonio de la segunda parte del 89. 

Preferimos pensar aquí, que mientras Vigo fue derrotado permanentemente en la segunda entrega, Gozer se mantuvo dormido durante ese tiempo, débil pero no derrotado. De no ser así, se estaría ignorando la segunda entrega y eso no nos gusta demasiado. Ignorar la de 2016 nos parece normal, pero la de 1989, donde aparece Harold Ramis (Egon), no nos parece correcto. Lo entenderéis cuando sepáis de que va la nueva película.


(¡Ojo, vamos a dar información del argumento, regresa aquí después de ver la película!)

En esta nueva aventura, una familia, compuesta por los protagonistas, pierden a su abuelo, que fallece. Un hombre huraño y de mal carácter que vive aislado en un pueblo perdido en la América profunda. Todos están convencidos de que era una persona solitaria, rara y que no le importaba nada más que si mismo.



El mal estado económico de la familia, que se refleja en la madre, que no dispone de sustento suficiente para mantener a su familia en la posición actual, obligan a esta a trasladarse a la vivienda de su familiar fallecido. Vivienda que ahora les pertenece.
Se trata de una caserón destartalado, más propio de una película de terror. Una vivienda abandonada y descuidada que se convertirá en su nueva casa.
En ella están escondidos los secretos más profundos del abuelo de los chicos (que luego se descubrirá que es Egon). Secretos que los chicos nunca pensarían que iban a descubrir.


Poco a poco descubren la mala impresión que su abuelo causaba en la gente del pueblo. Al mismo tiempo, van trasteando la nueva vivienda, que les va desvelando sus secretos escondidos. Al final los chicos descubren el Ecto-1, el coche de los Cazafantasmas, al igual que todo el equipo de cachivaches que utilizaban durante sus trabajos. Los jóvenes, acompañados ahora de nuevos amigos, se sorprenden del descubrimiento y comienzan a atar cabos.
Al mismo tiempo, una sucesión de terremotos asola el pueblo a diario y desde hace mucho tiempo. Nadie sabe el porqué, ya que en la zona no hay fallas, ni motivos conocidos para la actividad sísmica. 


Diferentes situaciones llevarán a los adolescentes a descubrir que algo raro esta sucediendo en el pueblo, y los temblores tienen relación con ello. Al mismo tiempo, descubren como Egon (el abuelo) investigaba sobre los peligros que acechaban a este pueblo y como se retiró voluntariamente y muy a su pesar, para proteger el pueblo y al mundo entero de lo que se escondía allí.




Nadie creyó a Egon cuando explicó a todo el mundo (incluidos sus ex-compañeros Cazafantasmas), lo que estaba a punto de suceder en ese lugar. Así que se vio obligado a instalarse allí, abandonando a toda su familia para montar guardia y detener al inframundo y a Gozer. Que seguía atrapado gracias a él, pero que constantemente luchaba por  liberarse. Durante más de 30 años Egon detuvo a Gozer, mientras le quedó un hálito de vida esa fue su misión. Pero una vez desaparecido era cuestión de tiempo que el desastre se desatara.

Los primeros contactos con fantasmas por todo el pueblo, anuncian lo que va a suceder. Inevitablemente Gozer escapa de su dimensión y entra en nuestro mundo. La histeria se desata y el resto de demonios regresan del inframundo del mismo modo que lo hicieron en 1984. 




Justo en esta parte es cuando podremos observar al maestro de las llaves (el profesor) y la guardiana de la puerta (la madre) convertidos en perros-demonio, exactamente igual que en la antigua película. Veremos juguetear a un hambriento nuevo "moquete" y desde luego, a Gozer.

Esta parte de la película repite de tal modo lo que sucede en la primera, que parece una copia. Quizás es cierto que se podría haber planificado algo diferente. Aunque el que quiera podrá justificarlo a nivel argumental. Gozer se rodea de sus perros y necesita de la misma fórmula (Maestro de las llaves + Guardiana de la puerta), para llegar a nuestra dimensión. Lo necesitó en los ochenta y lo necesita ahora.


Lo más interesante es que el personaje de Harold Ramis (Egon), es el pilar indiscutible de todo el argumento, a pesar de no estar presente en la película. Lo que constituye un impresionante homenaje al desaparecido actor. Él es el inductor de todo y de forma muy ingeniosa estará presente en muchas de las escenas de la película. Su recuerdo, sus actos y su memoria estarán presentes desde el inicio, sea de un modo u otro. Incluso regresará como un fantasma más, pero esta vez para ayudar. 
Esta será la parte que más llegará a los fans. La mayoría no podrán evitar derramar alguna lágrima en el momento final, cuando Harold Ramis hace su aparición como fantasma. Para ayudar a su nieta con el desintegrador de partículas y de este modo unirse al resto de los Cazafantasmas originales, que han aparecido por sorpresa. Se producirá un momento nostálgico sin igual que muchos no esperaban. (si habéis leído esto sin ver la película, ahora os estaréis arrepintiendo).


Los efectos especiales también conservan su esencia ochentera. Ya que para algunos de ellos se han utilizado maquetas, tal y como se hizo en la original (hablamos de los perros-demonio). Esto mantiene la estética original.


Hubiese sido mucho más fácil utilizar el personaje de Bill Murray para alimentar la historia. Pero han preferido convertir la experiencia en un gran homenaje a Harold. Lo cual nos parece entrañable y que funciona muy bien. Algo bastante ingenioso que muchos fans (como yo mismo), no esperarán y que les hará emocionarse.
Desde NostromoCine hemos llegado a la conclusión que Cazafantasmas Más Allá (Nos gusta más el original: Afterlife), es una gran película. Con todo el espíritu de los 80 condensado en un gran homenaje.



viernes, 30 de julio de 2021

FLASH GORDON

Película de Mike Hodges y producida por Dino De Laurentiis que se estrenó en 1980, de gran éxito en Europa y Reino Unido, aunque considerada un fracaso en Estados Unidos. Con los años se ha convertido en una película de culto. Su característica más obvia es su descarada puesta en escena Kitsch.

Basada en el famoso cómic, la pretensión inicial de Dino De Laurentiis era crear un universo similar al creado por George Lucas con La Guerra De Las Galaxias (1977). Curiosamente George Lucas inició la creación de su universo, pensando en llevar al cine los comics de Flash Gordon.

Esa estética pulp tan llamativa que luce la película ya era descarada cuando se estrenó. Sus efectos especiales de serie B, también eran obvios. Aunque el colorido y la calidad de su fotografía ha conseguido que hoy luzca super bien y parezca que estamos viendo viñetas de cómic en la gran pantalla. Es impresionante verla hoy en día, teniendo en cuenta lo que es, una película para divertirse.

Comparada con otras películas que se habían estrenado con anterioridad, la película no estaba a la altura en efectos visuales. La tecnología necesaria para llevar a buen termino este tipo de cine existe hoy.

Así que se recurrió a lo que se tenía, que funciona bien en muchas escenas, pero fracasan de forma un tanto graciosa en otros momentos (los hombres halcón). Esto la convierte en una película de serie B, aunque su tratamiento y su promoción fue como la de una producción grande de primera categoría. Hay que recordar que algunos de sus efectos se hicieron de forma artesanal adrede, a pesar de que su resultado es menos creíble. Las series B tienen eso también.

Si analizamos otras películas posteriores de la época, resulta curioso comprobar como Flash Gordon, a pesar de todo, aguanta mejor el paso de los años. Seguramente es debido a que hoy en día se entiende mejor esa estética tan atrevida y colorida, su vestuario, sus efectos, su escenas sazonadas con erotismo y por su puesto su humor. La película nunca pretendió tomarse demasiado en serio nada. Todos se dieron cuenta, menos el productor.





Otros actores fueron considerados para el papel principal antes de que se lo quedara Sam J.Jones. El primer nombre que se pensó fue el de Kurt Rusell y el segundo Arnold Schwarzenegger. Pero esto fueron ideas que nunca llegaron a materializarse. El primero rechazó el proyecto y al segundo nunca se le preguntó.

Del mismo modo la música, que por suerte para todos y para la película la realizó Queen. Tuvo un responsable diferente en la mente de De Laurentiis, que pensaba en Pink Floyd. De ser así, el carácter de la película hubiera dado un giro terrible. Esas imágenes necesitaban un grupo que entendiera lo que estaban viendo. Cuando la banda visionó algunas imágenes en pos-producción dijeron que si (curiosamente les ocurrió lo mismo con Los Inmortales en 1985).

Del mismo modo se pensó en Fellini como director y en general nada en esta película salió como en un inicio se planteó. Pero la estética atrevida y desvergonzada si corrió a cargo de modistos y decoradores que habían trabajado con Fellini.




Continuando con las improvisaciones (que fueron muchas), el logo de la película fue diseñado por Freddie Mercury (era bueno hasta para eso). En general se cuenta que el rodaje fue caótico hasta cierto momento donde el director se relajó y dejo que todo fluyera. Se improvisaba tanto que no parecía haber guion. Ni siquiera un calendario de rodaje que seguir.
Max Von Sydow (genial en su interpretación de Ming), Ornella Mutti, Sam J.Jones, un desconocido Timothy Dalton, Chaim Topol, Brian Blessed y Melody Anderson fueron los actores principales. 




Desvergonzada, atrevida, colorida, cursi, erótica, humorística y exagerada. Todo se improvisó, nada salió como estaba planeado, incluso el actor principal desapareció durante los últimos días de rodaje. A pesar de ello, esta película es una de las space opera mas alucinantes, ingeniosas y divertidas nunca vistas. Abandona tus prejuicios y disfruta.


domingo, 30 de agosto de 2020

TENET

Me niego a dar el beneplácito a una película por el hecho de que la crítica se haya confabulado para decidir que es una gran película. Sobretodo cuando todo apunta a lo contrario.
Tenet es como lo que su titulo transmite: nada. Una pretenciosa muestra de que no todo vale. Es por esto que esta va a ser la primera entrada con crítica negativa de NostromoCine.

Interstellar y Origen fueron pequeñas maravillas, complicadas de seguir y de entender, pero con una base argumental solida que en las propias películas saben explicar muy bien. El problema es traducir el significado de lo que ocurre mientras se ve la película, sin perderse por el camino. Esto, aún entendiendo como funciona su historia y el contexto de ficción y/o leyes físicas que rigen en el argumento, es difícil en ocasiones y lo sabemos.


Pero en Tenet ya te avisan de que es mejor no entender nada y limitarse a vivir la experiencia. Lo que resulta una excusa perfecta para esconder un argumento basado en algo que ni los mismos que lo han escrito llegan a entender bien. Algo que hubiese sido criticado de forma salvaje en cualquier otro producto comercial. En otra película.


Me recordó en su primera media parte a cualquier película de James Bond. El personaje principal interpretado por John David Washington, que carece de todo lo que pueda hacer interesante a cualquier personaje, es precisamente el que actúa como un James Bond sin carisma. Otro ejemplo con el que comparar este personaje es el de Tom Cruise en la saga Misión Imposible. Donde, de nuevo, Cruise gana en la comparación.

La acción se sucede sin ningún sentido claro, de forma vertiginosa, alcanzando el personaje todos y cada unos de sus objetivos, sin ni siquiera despeinarse. A pesar de que todos ellos son misiones prácticamente imposibles por como las venden. Pero este es el tiempo (los segundos en que hablan del objetivo a asumir en los siguientes 2 minutos), con el que se entretiene el director en hablar de ellos, poco más. Acto seguido ya está conseguido. Hasta a James Bond le resulta más difícil alcanzar los suyos.


Todo este sin sentido, que en otras películas resulta muy criticable, aquí no parece importar a nadie. Lo que vendrá después queda oculto bajo una molesta banda sonora (si se le puede llamar así), que irrita y daña los oídos. Estoy seguro que muchos se han sentido agredidos por esos sonidos electrónicos pasados de volumen que anuncian la acción antes de que esta se de (y que te acompañan como un martirio durante toda la escena). O esos puñetazos marcados con golpes de percusión más propios de un Terminator o alguna pelea de súper-heróes. No termino de entender el porqué de ese elevado volumen.

Tengo que decir que yo termine mareado y con sensación de angustia que se mantuvo durante toda la película. Un malestar que me hizo desear que el sin sentido terminara pronto. Una experiencia así no podría terminar bien. A estas alturas ya me consta que no fui el único.


Ni siquiera el drama matrimonial en el que participa el excelente Kenneth Branagh (lo único interesante de la película) resulta sólido. Quizás sean los momentos más buenos porque se convierten en un oasis de tranquilidad sin la pesada banda sonora torturándote. Como siempre este actor se come la pantalla y es lo único salvable de todo el conjunto.



El caso es que es la primera vez que me siento incomodo e irritado viendo una película. Lo que menos me gustó fue su molesta banda sonora y los efectos de sonido, todo a un volumen exagerado (sin ese volumen quizás no sea tan criticable). Después esta el poco interés en explicar lo que esta ocurriendo en las imágenes. Si ocurren cosas que no entendemos, tampoco sabemos hacia donde va la historia (el porque se va de aquí para allá) y no tiene sentido continuar viendo la película.


No es el mismo caso que en otras películas como las comentadas al inicio. Es fácil que mucha gente no entienda el argumento, aún habiendo explicado claramente lo que ocurre y de que va toda la historia. De hecho recuerdo cuando se estrenó Matrix, donde a pesar de que en la película se explica muy bien que es lo que esta ocurriendo, mucha gente salió con cara de interrogante. No es este el caso.