viernes, 30 de julio de 2021

FLASH GORDON

Película de Mike Hodges y producida por Dino De Laurentiis que se estrenó en 1980, de gran éxito en Europa y Reino Unido, aunque considerada un fracaso en Estados Unidos. Con los años se ha convertido en una película de culto. Su característica más obvia es su descarada puesta en escena Kitsch.

Basada en el famoso cómic, la pretensión inicial de Dino De Laurentiis era crear un universo similar al creado por George Lucas con La Guerra De Las Galaxias (1977). Curiosamente George Lucas inició la creación de su universo, pensando en llevar al cine los comics de Flash Gordon.

Esa estética pulp tan llamativa que luce la película ya era descarada cuando se estrenó. Sus efectos especiales de serie B, también eran obvios. Aunque el colorido y la calidad de su fotografía ha conseguido que hoy luzca super bien y parezca que estamos viendo viñetas de cómic en la gran pantalla. Es impresionante verla hoy en día, teniendo en cuenta lo que es, una película para divertirse.

Comparada con otras películas que se habían estrenado con anterioridad, la película no estaba a la altura en efectos visuales. La tecnología necesaria para llevar a buen termino este tipo de cine existe hoy.

Así que se recurrió a lo que se tenía, que funciona bien en muchas escenas, pero fracasan de forma un tanto graciosa en otros momentos (los hombres halcón). Esto la convierte en una película de serie B, aunque su tratamiento y su promoción fue como la de una producción grande de primera categoría. Hay que recordar que algunos de sus efectos se hicieron de forma artesanal adrede, a pesar de que su resultado es menos creíble. Las series B tienen eso también.

Si analizamos otras películas posteriores de la época, resulta curioso comprobar como Flash Gordon, a pesar de todo, aguanta mejor el paso de los años. Seguramente es debido a que hoy en día se entiende mejor esa estética tan atrevida y colorida, su vestuario, sus efectos, su escenas sazonadas con erotismo y por su puesto su humor. La película nunca pretendió tomarse demasiado en serio nada. Todos se dieron cuenta, menos el productor.





Otros actores fueron considerados para el papel principal antes de que se lo quedara Sam J.Jones. El primer nombre que se pensó fue el de Kurt Rusell y el segundo Arnold Schwarzenegger. Pero esto fueron ideas que nunca llegaron a materializarse. El primero rechazó el proyecto y al segundo nunca se le preguntó.

Del mismo modo la música, que por suerte para todos y para la película la realizó Queen. Tuvo un responsable diferente en la mente de De Laurentiis, que pensaba en Pink Floyd. De ser así, el carácter de la película hubiera dado un giro terrible. Esas imágenes necesitaban un grupo que entendiera lo que estaban viendo. Cuando la banda visionó algunas imágenes en pos-producción dijeron que si (curiosamente les ocurrió lo mismo con Los Inmortales en 1985).

Del mismo modo se pensó en Fellini como director y en general nada en esta película salió como en un inicio se planteó. Pero la estética atrevida y desvergonzada si corrió a cargo de modistos y decoradores que habían trabajado con Fellini.




Continuando con las improvisaciones (que fueron muchas), el logo de la película fue diseñado por Freddie Mercury (era bueno hasta para eso). En general se cuenta que el rodaje fue caótico hasta cierto momento donde el director se relajó y dejo que todo fluyera. Se improvisaba tanto que no parecía haber guion. Ni siquiera un calendario de rodaje que seguir.
Max Von Sydow (genial en su interpretación de Ming), Ornella Mutti, Sam J.Jones, un desconocido Timothy Dalton, Chaim Topol, Brian Blessed y Melody Anderson fueron los actores principales. 




Desvergonzada, atrevida, colorida, cursi, erótica, humorística y exagerada. Todo se improvisó, nada salió como estaba planeado, incluso el actor principal desapareció durante los últimos días de rodaje. A pesar de ello, esta película es una de las space opera mas alucinantes, ingeniosas y divertidas nunca vistas. Abandona tus prejuicios y disfruta.


No hay comentarios:

Publicar un comentario