jueves, 2 de marzo de 2017

LOS INMORTALES


Esta película es una de mis preferidas de los ochenta. Todo un portento de estupenda química entre actores y personajes, que de por sí ya son atractivos y carismáticos. Una de las pocas películas de las que se puede sentir orgulloso Cristopher Lambert y la única en la que tiene un papel que le va como anillo al dedo. En cambio es otra en la que Sean Connery esta inconmensurable. Este papel seguramente será uno de los más atractivos de su carrera junto a James Bond. Genial fotografia y espectaculares escenarios, increíble atmósfera y no nos podemos olvidar de esa espectacular banda sonora a cargo de Queen, grandes como siempre.
Pero también esa magia especial que despide su argumento, ese magnetismo que fascina y te hace estar enganchado a la pantalla, intentando entender quienes son los inmortales y, al mismo tiempo, esperando que no se desvele tan romántico y fantástico enigma...


Sin duda este es uno de las películas más interesantes y originales de aquella década. Plantea la historia de un personaje inmortal a lo largo de los siglos y con él la de otros como él, la historia de los inmortales.


La película consiguió un éxito discreto, que fue mayor fuera de Estados Unidos (pero se recuperó y se convirtió en película de culto gracias al boom del vídeo).
Combinación de aventura romántica y la épica de factores históricos. Como algunos sucesos que directa o indirectamente se narran. Todo ello dan una solidez innegable a su argumento y fueron decisivos para enamorar y hacer soñar a los espectadores, entre los que me encuentro.
La espectacular banda sonora creada por Queen encaja como anillo al dedo, al igual que la música original que Michael Kamen diseñó.

El director Rusell Mulcahy, conocido por su trabajo en vídeo clips de la época, aplicó esos conocimientos y experiencia en esta obra maestra. El resultado es un gran espectáculo narrativo y visual, diferente al de otras películas de la época y que recuerda más a un vídeo clip que a un filme. Pero que en este caso se agradece, ya que encaja perfectamente con la estética y argumento. Así que la forma en que esta contada esta película a nivel visual es, para mi, la acertada. A nivel narrativo también, pues utiliza flashes retrospectivos para contarnos poco a poco la larga historia de su protagonista Connor McLeod y a su vez la de ese "clan de las sombras" que vaga por la Tierra desde el principio de los tiempos. (El Clan de las Sombras fue el primer titulo que se pensó para esta película).




El director encargó a Queen un tema para la banda sonora. Pero sus componentes se entusiasmaron tanto al ver los primeros montajes de la película, que decidieron escribir una canción cada uno de ellos. Esto desembocó en todo un álbum dedicado e inspirado, casi en su totalidad, en este filme. El disco se titula "A Kind Of Magic"(1986), titulo inspirado en una frase de la película que McLoud pronuncia en una escena a una niña (Rachel), a la que rescata y que será su cómplice en el futuro.







Si tengo que poner un "pero" a esta película será a los efectos especiales de las últimas escenas. Cuando McLoud lucha con el Kurgan debajo del cartel publicitario y luego dentro de la nave industrial.

En aquellos años ya no pasaban inadvertidas esas cuerdas que tiran del cartel para que se derrumbe y de las cuerdas que elevan a Lambert en el aire, después de ganar la batalla. Un error técnico fácilmente subsanable con los retoques digitales de hoy en día. Así que ya tardan en remasterizar y limpiar esta película para una nueva edición en bluray, del mismo modo que hizo George Lucas con la saga Star Wars.





La película se cuenta desde la actualidad, el momento real en que se estrenó, 1986. Desde ella y sus acontecimientos el personaje viaja al pasado con sus recuerdos. Recuerdos de varios siglos caminando por el mundo. Como ya ocurrió antes, llega un momento en que los enfrentamientos entre inmortales salen a la luz. Para la policía son asesinatos o ajustes de cuentas entre bandas. Lo más macabro es que sus batallas terminan siempre con una cabeza cortada.
Los inmortales sólo tienen una forma de morir, que sus cabezas se separen del cuerpo. Así que ese es el único modo en que pueden terminar sus enfrentamientos. Al hacerlo, el vencedor absorbe la fuerza del vencido y crece en poder. Al final solo puede quedar uno y dependiendo de la naturaleza de ese vencedor, su dominio sobre los mortales podrá ser justo o podrá someterlos a una eterna oscuridad.




La belleza de algunas de sus imágenes, sobretodo las situadas en Escocia, convierten a la película en una espectáculo en si mismo (tuve la oportunidad de visitar esos escenarios en persona y son impresionantes por si solos). Los cambios de tiempo, de edad histórica. Hacen interesante y divertido el entretenimiento y el trasfondo romántico de su argumentación terminan por enamorar. "¿Quien quiere vivir para siempre?"...


Uno de los momentos más emocionantes es cuando Heather muere de mayor, mientras su marido McLoud sigue tan joven como el primer día. La música de Queen ayuda mucho a que estas escenas sean inolvidables. Al igual que el momento en que, en otra época, McLoud y Rachel se conocen por primera vez. O la divertida anécdota del duelo en Boston, etc...
Pero tengo otro "pero", aunque no es culpa de la película esta vez. Se trata del horrendo doblaje. Hay fallos de doblaje que no se pueden pasar por alto. Alguno del Kurgan y sobretodo el doblaje de la investigadora y experta en armas Brenda Wyatt. Esto es algo que hay que corregir ya, porque te sacan de golpe de la película.
Estos pequeños inconvenientes (el del doblaje no es culpa del filme repito) no le restan valor. Gran película, muy querida por los que recordamos aquellos años y que se ha convertido en un filme de culto, porque no podría ser de otro modo, lo merece. Las secuelas no estarán a la altura y mejor pasarlas por alto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario